Tarta de queso con arándanos

Ingredientes:

Para la base:

• 200 g de galletas tipo digestive
• 100 g de mantequilla derretida

Para el relleno:

• 500 g de queso crema
• 150 g de azúcar
• 3 huevos
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 200 g de arándanos frescos (puedes usar también arándanos congelados)

Para la cobertura de arándanos:

• 150 g de arándanos
• 2 cucharadas de azúcar
• 1 cucharada de agua

Instrucciones:

1. Precalienta el horno a 180°C.
2. Tritura las galletas digestive hasta obtener migas finas. Mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta que obtengas una mezcla homogénea. Presiona esta mezcla en la base de un molde para tarta desmontable para formar la base de la tarta. Lleva al refrigerador mientras preparas el relleno.
3. En un tazón grande, bate el queso crema hasta que esté suave. Añade el azúcar y continúa batiendo hasta que la mezcla esté cremosa.
4. Agrega los huevos uno por uno, batiendo bien después de cada adición. Añade la esencia de vainilla y mezcla bien.
5. Vierte la mezcla de queso crema sobre la base de galleta en el molde.
6. En un tazón pequeño, mezcla los arándanos con 2 cucharadas de azúcar. Distribuye los arándanos sobre la mezcla de queso crema.
7. Hornea en el horno precalentado durante aproximadamente 45-50 minutos o hasta que el centro de la tarta esté firme.
8. Mientras la tarta se hornea, prepara la cobertura de arándanos. En una cacerola pequeña, cocina los arándanos, el azúcar y el agua a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que los arándanos se rompan y la mezcla tenga una consistencia de jarabe. Retira del fuego y deja enfriar.
9. Una vez que la tarta esté lista, sácala del horno y deja que se enfríe a temperatura ambiente. Luego, refrigérala durante al menos 4 horas o durante toda la noche.
10. Antes de servir, vierte la cobertura de arándanos sobre la tarta refrigerada.

¡Qué aproveche!