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Tarta fría de chocolate

Ingredientes:

Para la base:

200 g de galletas tipo María o galletas de chocolate
100 g de mantequilla derretida
Para el relleno:

300 g de chocolate negro (puedes ajustar según tu preferencia)
500 ml de nata para montar (crema para batir)
100 g de azúcar glass
1 cucharadita de extracto de vainilla

Instrucciones:

Preparación de la base:

Tritura las galletas en migas finas, puedes utilizar un procesador de alimentos o meterlas en una bolsa y aplastarlas con un rodillo.
En un bol, mezcla las migas de galleta con la mantequilla derretida hasta obtener una mezcla homogénea.
Cubre el fondo de un molde desmontable para tartas con esta mezcla de galleta, presionando suavemente para compactarla.
Lleva el molde al refrigerador mientras preparas el relleno.
Preparación del relleno:

Trocea el chocolate negro en pedazos pequeños y colócalos en un bol resistente al calor.
En una cacerola, calienta 250 ml de nata para montar hasta que esté caliente pero no hierva.
Vierte la nata caliente sobre el chocolate troceado y deja reposar durante un minuto.
Remueve con una espátula hasta que el chocolate se derrita por completo y la mezcla esté suave y brillante. Agrega el extracto de vainilla y mezcla bien.
Deja enfriar la mezcla de chocolate a temperatura ambiente.
Montaje:

En un bol aparte, bate los 250 ml restantes de nata para montar con el azúcar glass hasta obtener picos suaves. No la montes en exceso para evitar que se vuelva demasiado espesa.
Incorpora la nata montada a la mezcla de chocolate en varias etapas, con movimientos suaves y envolventes para mantener la textura aireada.
Vierte la mezcla sobre la base de galleta en el molde.
Refrigeración:

Cubre el molde con papel film o una tapa y lleva la tarta al refrigerador. Deja enfriar durante al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que cuaje adecuadamente.
Decoración (opcional):

Puedes decorar la tarta fría de chocolate con virutas de chocolate, ralladura de chocolate blanco, frutos rojos frescos o crema batida antes de servirla.
¡Y eso es todo! Ahora tienes una deliciosa tarta fría de chocolate lista para disfrutar. ¡Buen provecho!

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